REVISTA AD’IP N.º52 – 2º CUATRIMESTRE 2023
SECCIÓN INTERESA AL PROFESIONAL – LA ARQUITECTURA CONSIDERADA COMO UN SERVICIO A LA SOCIEDAD
Carme Pinós i Desplat
Arquitecta, Profesora Universitaria y Conferenciante.
“Siempre he considerado la arquitectura como un servicio a la sociedad, una posibilidad de dar dignidad a la gente. Este ha sido siempre mi trabajo…”
La Arquitectura considerada como un servicio a la sociedad
A Carme, en una conferencia, se le ve siempre inquieta, siempre en movimiento ante el público … reconoce que se sabe explicar o, mejor dicho, que llega a las personas, pero no cree que sepa venderse, hablar de sí misma. Asume la responsabilidad de escuchar y comprender, y sus alumnos respetan «ese poder» que les traslada de poder cambiar las cosas, desde la libertad de la responsabilidad que se asume, tratándoles como arquitectos desde la primera clase, como a ella la trataron. El arquitecto Wolf D. Prix comentaba hace años en una entrevista que la función de la arquitectura es satisfacer la necesidad emocional de la gente. A poco que uno siga el trabajo de Carme Pinós, lea o escuche cómo habla de cada proyecto, se da cuenta por qué llega más allá con su arquitectura y cómo consigue colmar esa necesidad.
Carme Pinós se ha posicionado como una de las arquitectas de mayor proyección internacional, que le han valido numerosos premios y menciones, tanto por su trayectoria profesional como por obras concretas. Además de otros muchos, desde estos últimos años hasta sus comienzos profesionales destacan grandes reconocimientos, como han sido el Premio Prat de la Riba del IEC, en 2023, Medalla de Oro de la Arquitectura y Premio Arnold W. Brunner Memorial Prize en 2022. Galardonada con el Premio Nacional de Arquitectura en 2021, promovido por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de España, un premio con más de noventa años de historia, que tiene como finalidad rendir testimonio de admiración a una persona física o entidad con personalidad jurídica que, con su trabajo o con el conjunto de su obra, contribuya o haya contribuido de forma extraordinaria al enriquecimiento de los aspectos sociales, tecnológicos y sostenibles de la Arquitectura o el Urbanismo español, dentro y fuera de las fronteras españolas.
Premio Internacional Francés de Mujeres Arquitectas 2017- ARVHA y Premio ArpaFIL 2017 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. En 2016, fue distinguida con la Richard J. Neutra Medal for Professional Excellence, otorgada por la Universidad Politécnica de California en Pomona, y con el Berkeley-Rupp Architecture Professorship and Prize, por su contribución a la promoción de la mujer en la arquitectura y su compromiso social. Otorgada por el Gobierno Catalán, por su aportación a la cultura y defensa de los valores cívicos de Cataluña, fue galardonada con la Creu de Sant Jordi en 2015. En 2012, fue nombrada International Fellow del Royal Institute of British Architects, y en el 2011, Honorary Member del American Institute of Architects. También destacan el Premio Nacional de Arquitectura y Espacio Público de la Generalitat de Catalunya, en 2008, por su trayectoria profesional. El Primer Premio de la IX Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo y también, en ese mismo año, el Premio ArqCatMón del Colegio Oficial de Arquitectos de Cataluña. Asimismo, recibió el Premio Nacional de Arquitectura del Consejo Superior de los Arquitectos de España en 1995, el Premio Ciutat de Barcelona en 1992 y el premio FAD de Arquitectura – Edificios de nueva planta de uso público, en 1991. Durante todos estos años, Carme Pinós ha compaginado su actividad como arquitecta con la docencia, siendo profesora invitada, entre otros lugares, en l’École Nationale Supérieure d’Architecture Paris-Malaquais; Harvard University Graduate School of Design; Columbia University en Nueva York; l’École Polytechnique Fédérale de Lausanne; l’École Nationale Supérieure d’Architecture Paris-Val de Seine y la Università de Venezia. Su obra está presente en destacadas colecciones museísticas, entre las que se encuentran las colecciones permanentes del Centre Pompidou de París o del MOMA neoyorquino. En 2018, su trabajo fue expuesto en la Biennale Architettura di Venezia y en febrero de 2021 la Fundación ICO de Madrid inauguró la Exposición monográfica “Carme Pinós – Escenarios para la vida” que recogía 88 proyectos destacados de su trayectoria profesional. El 28 de octubre de 2021 tuvo lugar la inauguración de la Exposición “Carme Pinós – Contexto y Conceptos” en el marco de la 2021 Bienal Internacional de Arquitectura de Euskadi MUGAK.
-Tenía unos catorce años cuando la idea de su padre de que fuera química se concretó finalmente, por su parte, en el camino que su hermano mayor no llegó a escoger y que formaba parte de ese esquema de su progenitor, y fue entonces cuando pensó que le tocaba a usted ser ese Arquitecto, algo que ya no dudó nunca. Su padre amaba el arte, era coleccionista de pintura y, aunque le hubiera gustado ser ingeniero de puentes y caminos, fue médico. ¿Qué cree que sería lo que su padre admiraría más de todo su recorrido profesional y de cómo ha interpretado ser Arquitecta y la arquitectura que ha desarrollado? Es indudable la gran referencia que supone su trabajo, como un día lo fue también para usted el de otros arquitectos. ¿Qué le gustaría que aprendieran los estudiantes de hoy de su legado?
-De mi padre aprendí el valor de la nobleza y la generosidad, espero no haberle defraudado demasiado en este sentido. Recuerdo una frase que me dijo cuando ya estaba muy enfermo y que nunca he olvidado: “pueden quitarte todo, pero nunca lo que has aprendido, lo que has almacenado en tu conocimiento”. Desde entonces tengo un gran afán de conocimiento que me mantiene siempre viva.
No soy consciente de dejar ningún legado, dejo obras que hemos realizado en el estudio con mi Equipo y que seguirán su curso a través de los años. La arquitectura es un servicio a la sociedad y, nos guste o no, se transforma a medida que ésta evoluciona. Lo que si me gustaría comunicar a la gente que empieza es mi entusiasmo en “el hacer” y la importancia de “la perseverancia”, que en mi caso ha tenido sus frutos.
-Cuenta a su lado, en su Equipo, con personas que le acompañan desde los inicios del Estudio de Arquitectura que lleva su nombre. Nos podemos imaginar ese proceso creativo, concebido y revisado por usted, en el que cuando ve momentos de atasco o conflicto les indica “que bajen”, que desconecten del ordenador y que caminen y recorran nuevamente los espacios a través del trazado manual de líneas; que cuando logren introducirse en la solución del entorno y el propio espacio, le acompañen al “cuarto de juegos” y que, recordando a Richard Sennett, con la selección del material a modelar, cortar y dar las primeras formas, ya se comience a otorgar la personalidad de ese proyecto. Tenemos el privilegio de que nos cuente, que nos trasmita de primera mano, ¿cómo se vive por su parte, y a la vez en ese trabajo del estudio, el inicio, desarrollo y culminación del encargo de proyecto, pasando por cada una de las fases y por cada departamento de su Equipo?
-Cada proyecto es un reto y una aventura que comparto con mi Equipo y con el Cliente. Todo empieza con saber escuchar, escuchar la demanda del Cliente, entender el contexto….
Quiero que mis propuestas sean claras y, al mismo tiempo, que tengan presencia. No me rindo hasta encontrar un esquema claro y simple que lo englobe todo, que resuelva tanto los aspectos formales como de funcionamiento. Cuando he encontrado este esquema, empiezo a trabajar en equipo realizando maquetas y dibujos a mano con las medidas reales del programa.
-La poética en la arquitectura, aquella que cuenta historias, que se basa en la relación de los conceptos y que transcienden más allá del argumento, va siempre incluida en sus trabajos, como se refleja de forma incomparable en el Laudado de Manuel Blanco, con motivo de la concesión que le hicieron de la prestigiosa Medalla de Oro de la Arquitectura que concede el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España. ¿Qué reconocimiento de todos los que ha obtenido le ha llegado más a nivel profesional y cual más a nivel personal? El llegar a este nivel profesional de reconocimiento por parte de la propia profesión y de la sociedad por su importante legado, ¿cómo le influye a la hora de abordar nuevos proyectos y cómo sería si su trabajo no hubiera llegado a ese nivel tan destacado?
-Me hizo especial ilusión el Premio Nacional de Arquitectura, quizás porque durante su entrega se celebró una gran fiesta donde pude invitar a muchísimos amigos. Más que un premio fue una celebración de mi trayectoria que pude compartir con gente a la que quiero.
A veces los éxitos tienen un lado negativo. En ocasiones se me considera una arquitecta cara por tener muchos reconocimientos, y no hay nada más alejado de la realidad. Es cierto que los reconocimientos que he recibido responden a muchas horas de trabajo, pero esto solo explica lo deficitarios que a veces nos resultan algunos proyectos y no tanto a unos honorarios altos.
-Arquitectos extranjeros se quisieron interesar por usted en un momento en el que las cosas no eran fáciles, en un momento de presentarse a concursos no ganados y de unos comienzos complicados. Ahora, después de tan amplia y reconocida trayectoria, parece como si siempre hubiera venido solo el trabajo. ¿Cómo es esa vivencia profesional a base de mucho esfuerzo y trabajo y por qué parece que el reconocimiento primero tenemos que recibirlo fuera de nuestro entorno para que luego se haga en casa?
-En esta pregunta solo puedo decirle sobre ello que, el hecho de que el reconocimiento siempre llega antes de fuera que del entorno inmediato, parece que es algo normal y que acontece no solo en nuestro país y en nuestra época.
“Fue bastante sorprendente incluso para mí misma darme cuenta de que siempre he estado haciendo lo mismo a cualquier escala, ya sea el proyecto de un edificio o el diseño de un jarrón.”
-Hace dos años, tras sus dos intensas exposiciones monográficas, donde trató en la primera sobre “su trayectoria” y luego, en la segunda, sobre “la trayectoria de sus proyectos”, pudo darse cuenta que algunos conceptos se van repitiendo a lo largo del tiempo en cada uno de sus proyectos, más allá de que cada decisión responde a ideas claras, no la forma por la forma, que como en un árbol la estructura y su viabilidad siempre están desde el inicio, conceptos como la simbiosis con la tierra, planos que se pliegan… y con unos esquemas de partida siempre muy simples, con el juego de dos o tres volúmenes, con propuestas claras y potentes. ¿Qué análisis se interioriza cuando uno se descubre así mismo desde otra perspectiva, cuando sale de su dinámica inmersiva de trabajo y contempla como observador todo lo que ha diseñado durante muchos años, y tras esas repetidas preguntas sobre lo que uno pretende, ofrece, sobre sensaciones y vivencias?
-Tengo interiorizada mi manera de actuar y cuando trabajo estoy concentrada en mis objetivos, sin mirarme a mí misma, solo poniendo el foco en lo que estoy haciendo.
A través de estas dos exposiciones intenté explicar cómo llegaba a unos resultados. De alguna manera implicó explicar mi proceso creativo con la idea de que estas reflexiones podían servirle a alguien. Fue bastante sorprendente incluso para mí misma darme cuenta de que siempre he estado haciendo lo mismo a cualquier escala, ya sea el proyecto de un edificio o el diseño de un jarrón. En todo caso, no tengo claro si este análisis me ha sido de utilidad en mi manera de trabajar, aunque espero que a alguien le haya servido.
-Una actuación de la forma más invisible posible acompañando al caminante, en el Lago Verde; un perfecto entendimiento con la funcionalidad, aplicado en las dos Torres Caixa Galicia, una destacando, la de oficinas, buscando notoriedad como símbolo de quien está detrás, y la otra, la de viviendas, buscando intimidad, e integrando ambas una imagen escultural; un Pabellón de descanso en medio del campo donde se incorporan las mismas piedras del entorno y con los mismos obreros que allí construyen… Desarrollar un diálogo con la naturaleza desde la generosidad, un guion claro con historias de relaciones entre la gente que va a habitar el proyecto, una arquitectura viva, con humanidad, sorpresa, emociones y sentimiento, que puede echar raíces y alimentarse del territorio que la rodea, con una estructura sólida y sencilla, que no se contrapone y que armoniza, ¿cómo se sitúa esta arquitectura ante materiales incapaces de registrar el tiempo, que más que envejecer se deterioran, con la prevalencia de una construcción más rentable e industrializada, que parece presentarse también como más sostenible? ¿Cómo es esa próxima arquitectura en la que ya nos encontramos y cómo encajan en ella sus nuevos proyectos que están por llegar?
“Esta construcción fácil y rápida cuyo único objetivo es resolver problemas inmediatos, además de no generar cultura… deteriora un planeta que sabemos que es frágil.”
-Si pensamos en materiales como el ladrillo o las vigas de hierro, podemos decir que responden a la necesidad de industrialización de la construcción de la revolución industrial del siglo XIX.
Cada época tiene su tempo. Actualmente todo parece más acelerado, pero, al mismo tiempo, tenemos que ser conscientes del deterioro del planeta que en ningún caso debemos acelerar. En cambio, parece que actualmente no pensamos a largo plazo, como pensaban los antiguos en lo referente a la arquitectura. No debemos olvidar que antes de construir destruimos, modificamos la topografía, arrancamos vegetación, reducimos el drenaje de la tierra… Y son acciones que no tienen marcha atrás, si desmontamos una ladera, difícilmente se recuperará en un futuro. Esta construcción fácil y rápida cuyo único objetivo es resolver problemas inmediatos, además de no generar cultura – que es la que se alimenta de los actos no pragmáticos- deteriora un planeta que sabemos que es frágil.
Si bien es cierto que tenemos que servir a un mercado que pone en marcha el sistema social que hemos creado, pero no debemos servir a la codicia de unos pocos en contra del bien de muchos.
“Esto me lleva a pensar que siempre tenemos que mirar hacia adelante, que aprendemos de un pasado que nos ha de servir para construir futuros mejores.”
-Pensando en ese concepto que está siempre en su arquitectura, una arquitectura que hace ciudad, que alberga la historia y la memoria colectiva, y sin poder evitar volver la mirada a la triste y lamentable actualidad, donde un terremoto, un volcán o una interminable guerra acaba con vidas de miles de personas junto a sus ciudades, completamente asoladas por la naturaleza o por la propia mano del hombre, cuando llega la calma o un anhelado final del conflicto, ¿Qué se pierde ante la destrucción de toda la arquitectura de una ciudad? ¿Cómo afrontaría como Arquitecta el reto de tener que dar respuesta a volver a diseñar el imaginario de esos ciudadanos, ante la destrucción de una guerra o ante la destrucción por la falta del cumplimiento de una construcción con las adecuadas medidas antisísmicas?
-Una comunidad se aglutina sobre su memoria y siempre es el resultado del ensamblaje de muchas capas que se superponen. ¿Qué sería París sin Notre Dame o la Torre Eiffel o qué sería cualquier ciudad sin su trama histórica? Por eso me altera cuando se destruyen elementos de la memoria de las ciudades. En todo caso hay ejemplos donde las ciudades han sabido sobreponerse y reinventarse y esto me lleva a pensar que siempre tenemos que mirar hacia adelante, que aprendemos de un pasado que nos ha de servir para construir futuros mejores. Este es el caso de Lisboa o Chicago, que vivieron grandes dramas como su terremoto o su incendio, que les sirvieron para avanzar.
“Mis propuestas siempre responden a un juego donde el último movimiento le toca al usuario final.”
-En su casa sabemos que tiene una mesa larga que soluciona el conflicto de sentarse coincidiendo con las patas, con el diseño de estas en forma de V en los extremos, que además está también en su proyecto del Pabellón en Río Blanco, y que estaría dentro de OBJECTS, una amplia colección de productos que nacen para solucionar inicialmente problemas de su casa o de su propio estudio, como estanterías para libros y muebles que no llegaran al suelo, con estructuras elementales y con montaje sencillo que dan opción de composiciones al usuario. ¿Cómo ha evolucionado esta colección que nació sin grandes pretensiones? Y no podría dejar en este punto de preguntarle por ese camino que nos lleva a todas partes que se inició con un triángulo equilátero, ¿Cómo llegó al desarrollo de esa pieza única de baldosa, en una combinación de dos colores, con simetría emparejada, con un diseño sin límites aparentes, y qué le ha aportado?
-Como arquitecto sé poner las cartas sobre la mesa, es decir, tener claro los problemas y demandas que he de resolver. En ese sentido, me puedo plantear problemas como la manera de agrupar mesas o bien almacenar libros, mi proceso creativo funciona igual en cualquier escala.
Por ejemplo, en la cafetería del CaixaForum de Zaragoza tenía que diseñar unas mesas de la cafetería que, según la afluencia de comensales, pudiesen ser agrupadas sin la incomodidad que implica juntar dos patas. Diseñé una mesa con patas triangulares que, cuando se juntan dos mesas, se convierten en una sola pata de sección cuadrada.
En general mis diseños se originan al intentar resolver problemas que he tenido en mi propia casa. En un momento dado, por la facilidad de producción y los buenos comentarios que tuve, decidí comercializar una línea de muebles bajo la marca Objects, creados y producidos desde el estudio.
El diseño de las baldosas Mallorca responde a la voluntad de encontrar un dibujo que diera la posibilidad de crear otros mil dibujos diferentes según se agrupasen. Mis propuestas siempre responden a un juego donde el último movimiento le toca al usuario final.
“Aunque no se puedan obviar los intereses económicos, no podemos olvidar que la responsabilidad de todos es la sociedad y, por lo tanto, en tener en cuenta la conservación del medio ambiente.”
AD’IP Asociación Española es una asociación sin ánimo de lucro que ocupa un espacio de representación sectorial de las Empresas Instaladoras de Sistemas de Construcción Seca, Falsos Techos, Aislamientos y Acondicionamientos Térmicos y Acústicos, Protección Pasiva Contra el Fuego, y Revestimientos Impermeabilizantes y Decorativos. El confort en los espacios que vivimos, trabajamos, estudiamos o disfrutamos, proporcionado por el aislamiento térmico, el acústico, la decoración y la salubridad que aportan los acabados es hoy aún más protagonista. ¿Cómo valora la unión de las empresas en esta representación para la defensa y mejora de la profesionalidad y cuáles cree que deberían de ser los objetivos y líneas de trabajo en beneficio del sector y dentro de este ámbito de representación? Bajo su amplia experiencia de proyectos internacionales. ¿Cómo es este perfil del Instalador en otros países en comparación a España?
-Creo firmemente en la colaboración, en marcarnos objetivos comunes entre empresas y proyectistas. Aunque no se puedan obviar los intereses económicos, no podemos olvidar que la responsabilidad de todos es la sociedad y, por lo tanto, en tener en cuenta la conservación del medio ambiente.
He trabajado en países tan diversos como México, Australia o Austria. En cada lugar la relación con los encargados de ejecutar una obra sigue parámetros muy distintos. En Australia, por ejemplo, todo debe estar absolutamente homologado. En México, en cambio, la mano de obra tiene aún mucha importancia y pueden llegar a ser grandes artesanos, algo que es difícil de encontrar en Europa.
“La mala acústica es capaz de destruir la buena percepción de un espacio.”
-La posición del edificio de la Escuela Primaria Lluís Vives funcionaba también como barrera que diera protección acústica. En el proyecto de Torre de Oficinas Cube, además de propiciar la entrada de iluminación natural, propició con su diseño una ventilación también natural de sus oficinas, verticalmente a través de la piel de celosía de madera y transversalmente con la supresión alternativa de tres plantas del edificio. ¿Recuerda algunos ejemplos en sus proyectos en los que haya tenido que gestionar importantes condicionantes en materia de Aislamiento, de Acondicionamiento Acústico o de Aislamiento Térmico?
-Me gusta siempre trabajar con especialistas y la acústica es algo que los arquitectos olvidamos frecuentemente. La mala acústica es capaz de destruir la buena percepción de un espacio. Nosotros acostumbramos a colaborar con un ingeniero de sonido, nuestros proyectos son un trabajo en equipo donde se entrelazan diversas especialidades.